lunes, 30 de agosto de 2010

FW: en Galería CAF

Para quienes no han podido ir, la exposición continúa abierta.
Lunes a viernes de 10 am a 5 pm y domingos de 11 am a 3 pm Obras de 40
maestros iberoamericanos

miércoles, 25 de agosto de 2010

JUDITH SCOTT . . el arte desde afuera

 

Judith Scott: arte desde afuera

Martes 24 de Agosto de 2010 16:47

 

Artistas contemporáneos

por Agustín Marangoni
elefantepixelado.blogspot.com

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

La vida de un artista y su obra van por caminos separados. Sus viajes por el mundo, sus angustias, sus amores, sus dolores, su locura son datos decorativos, la obra tiene que hablar por sí misma, ninguna aventura la legitima. Aún así, hay historias que es inevitable contar y que ayudan, como el caso de Judith Scott (1943 – 2005), a entender procesos creativos.

Hermanas gemelas: Joyce, perfectamente sana; Judith nació con síndrome de down. A los seis años, sus padres internaron a Judith en un centro para discapacitados en Ohio (EEUU) bajo la excusa que no podían hacerse cargo de su cuidado. Jamás la fueron a buscar. Pasaron 36 años hasta que su hermana, que nunca se había olvidado de ella, logró localizarla y rescatarla de ese instituto. El reencuentro fue un golpe muy duro, Judith había vivido aislada en una habitación donde la sometían a experimentaciones con drogas psiquiátricas; estaba mal alimentada; era sordomuda y nadie se había dado cuenta; nunca había sido tratada por su enfermedad ni le habían enseñado ningún lenguaje de signos para que se comunicara. Fueron 36 años de torturas y silencio.

A los dos años de haber regresado a su casa, en 1988, Joyce llevó a su hermana al Centro de arte de Oakland para comenzar con un tratamiento alternativo, la idea era estimularla a través de la expresión artística para que se relacione con su entorno. En un principio, sólo hacía garabatos en papel. Hasta que un día le acercaron un ovillo de lana y unas maderas: ese fue el punto de inflexión. Judith comenzó a envolver todo lo que tenía a su alrededor, creaba figuras sorprendentes a partir de los objetos que encontraba, como si fuera un insecto que construye un capullo.

Los profesionales que siguieron el proceso cuentan que Judith robaba absolutamente todo lo que veía, desde un ventilador hasta un pedazo de cartón o un paquete vacío de snacks, para envolverlo. Adentro de sus esculturas han encontrado hasta un carrito de supermercado, que estaba abandonado y que ella escondió en su habitación para convertirlo en una obra de arte.

Las piezas de Judith fueron creciendo en forma y tamaño, y su fama comenzó a expandirse por todo el país. El psicólogo e historiador de arte John MacGregor escribió en 1999 un conocido ensayo titulado Metamorphosis: the fiber art of Judith Scott donde explica y analiza este caso tan particular, uno de los más paradigmáticos dentro del Art brut. El término Art brut fue concebido por el artista francés Jean Dubuffet en 1945, hace referencia a la expresión artística que no tiene ningún filtro académico, técnico, institucional ni social. Dubuffet asegura que todos los seres humanos tienen un potencial creativo que la sociedad aplasta con sus códigos y normas de comportamiento. Sólo quienes están por fuera de esos márgenes son capaces de realizar obras artísticas puras, sin condicionamientos. Estos artistas, también llamados outsiders, no buscan ser famosos, ni millonarios, ni crear una obra bella. Ni siquiera se preocupan por mostrar lo que hacen. Nada. Sólo expresarse desde lo más profundo.

Actualmente sus obras cotizan en el mercado internacional con precios que alcanzan los 20 mil dólares. Museos de Art brut de Tokio, Dublín y Baltimore, también galerías y coleccionistas privados, se han interesado por sus esculturas. Los directores Lola Barrera e Iñaki Peñafiel filmaron en 2006 el documental ¿Qué tienes debajo del sombrero?, donde cuentan la oscura infancia de Judith y la muestran en pleno proceso creativo.

 

JUDITH SCOTT . . el arte desde afuera

 

 

Judith Scott: arte desde afuera

Martes 24 de Agosto de 2010 16:47

 

Artistas contemporáneos

por Agustín Marangoni
elefantepixelado.blogspot.com

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

La vida de un artista y su obra van por caminos separados. Sus viajes por el mundo, sus angustias, sus amores, sus dolores, su locura son datos decorativos, la obra tiene que hablar por sí misma, ninguna aventura la legitima. Aún así, hay historias que es inevitable contar y que ayudan, como el caso de Judith Scott (1943 – 2005), a entender procesos creativos.

Hermanas gemelas: Joyce, perfectamente sana; Judith nació con síndrome de down. A los seis años, sus padres internaron a Judith en un centro para discapacitados en Ohio (EEUU) bajo la excusa que no podían hacerse cargo de su cuidado. Jamás la fueron a buscar. Pasaron 36 años hasta que su hermana, que nunca se había olvidado de ella, logró localizarla y rescatarla de ese instituto. El reencuentro fue un golpe muy duro, Judith había vivido aislada en una habitación donde la sometían a experimentaciones con drogas psiquiátricas; estaba mal alimentada; era sordomuda y nadie se había dado cuenta; nunca había sido tratada por su enfermedad ni le habían enseñado ningún lenguaje de signos para que se comunicara. Fueron 36 años de torturas y silencio.

A los dos años de haber regresado a su casa, en 1988, Joyce llevó a su hermana al Centro de arte de Oakland para comenzar con un tratamiento alternativo, la idea era estimularla a través de la expresión artística para que se relacione con su entorno. En un principio, sólo hacía garabatos en papel. Hasta que un día le acercaron un ovillo de lana y unas maderas: ese fue el punto de inflexión. Judith comenzó a envolver todo lo que tenía a su alrededor, creaba figuras sorprendentes a partir de los objetos que encontraba, como si fuera un insecto que construye un capullo.

Los profesionales que siguieron el proceso cuentan que Judith robaba absolutamente todo lo que veía, desde un ventilador hasta un pedazo de cartón o un paquete vacío de snacks, para envolverlo. Adentro de sus esculturas han encontrado hasta un carrito de supermercado, que estaba abandonado y que ella escondió en su habitación para convertirlo en una obra de arte.

Las piezas de Judith fueron creciendo en forma y tamaño, y su fama comenzó a expandirse por todo el país. El psicólogo e historiador de arte John MacGregor escribió en 1999 un conocido ensayo titulado Metamorphosis: the fiber art of Judith Scott donde explica y analiza este caso tan particular, uno de los más paradigmáticos dentro del Art brut. El término Art brut fue concebido por el artista francés Jean Dubuffet en 1945, hace referencia a la expresión artística que no tiene ningún filtro académico, técnico, institucional ni social. Dubuffet asegura que todos los seres humanos tienen un potencial creativo que la sociedad aplasta con sus códigos y normas de comportamiento. Sólo quienes están por fuera de esos márgenes son capaces de realizar obras artísticas puras, sin condicionamientos. Estos artistas, también llamados outsiders, no buscan ser famosos, ni millonarios, ni crear una obra bella. Ni siquiera se preocupan por mostrar lo que hacen. Nada. Sólo expresarse desde lo más profundo.

Actualmente sus obras cotizan en el mercado internacional con precios que alcanzan los 20 mil dólares. Museos de Art brut de Tokio, Dublín y Baltimore, también galerías y coleccionistas privados, se han interesado por sus esculturas. Los directores Lola Barrera e Iñaki Peñafiel filmaron en 2006 el documental ¿Qué tienes debajo del sombrero?, donde cuentan la oscura infancia de Judith y la muestran en pleno proceso creativo.

 

martes, 24 de agosto de 2010

El otro Magritte

 

http://www.cuartopoder.es/elcondensadordefluzo/files/2010/07/175.jpg

 

lunes, 9 de agosto de 2010

MARIANELLA ORAA CON LOS ORFEONISTAS DE SIEMPRE.

 

 


http://www.youtube.com/watch?v=bYkyFxSQ-Xo

QUERIDOS AMIGOS   LES DEDICO ESTE VIDEO CON MUCHO CARIÑO, ESPERANDO SEA DEL AGRADO DE
TODOS USTEDES. NO ES MUY FÁCIL HACER ESTAS COSAS Y REQUIERE DE MUCHO
TIEMPO Y DEDICACIÓN.

OTROS VIDEOS CON LOS ORFEONISTAS DE SIEMPRE ESTAN EN FACEBOOK. YOUTUBE Y WWW.GLORIA.TV
ELLOS SON. AVE MARIA, PARTAMOS A BELEN Y ADIOS MARIPOSITAS.
UN ABRAZO PARA TODOS.

MARIANELLA ORAA.

 

 

viernes, 6 de agosto de 2010

Noticias Arteselección

 

 

logo

El mercado del Arte supera la crisis tras dos años de retrocesos muy importantes

El mercado del Arte parece haber superado la recesión tras dos ejercicios en los que se vio muy afectado por las turbulencias económicas. Las dos principales subastadoras del sector han anunciado importantes mejoras en sus balances durante el primer semestre de 2010, con aumentos de la facturación que oscilan entre el 73 por ciento, en el caso

de Sotheby´s, y del 42 por ciento, en el de Christie’s.
2010 vuelve a ser un año con pujas de gran calado, como las que llevaron a la casa lider a pulverizar todos los records con un Picasso que alcanzó los 73 millones de euros en el mes de mayo. Su principal competidora también puede presumir de haber superado los 66 millones con una

escultura de Alberto Giacometti subastada a principios de febrero.
"La confianza en el mercado del Arte se ha hecho evidente”, explica Edward Dolman, director ejecutivo de Christie’s, que asigna un "papel creciente” a los nuevos inversores asiáticos.
La crisis internacional provocó caídas del 30 por ciento en 2008, y del 10 por ciento en 2009.

Recuperan el Portinari robado en Pernambuco

Un cuadro de Cândido Portinari robado en el Museo de Pernambuco ha sido recuperado dos semanas más tarde en Río de Janeiro. Se trata de ‘El Entierro’, un óleo que fue propiedad de Assis Chateaubriand. La policía lo encontró en manos de una persona que estaría negociando su venta en el barrio turístico de Copacabana. Según los responsables de la investigación, se decidió interceptar al sospechoso antes de que llegara a reunirse con su cliente para evitar riesgos a la obra.

foto

VUELVEN LAS PINTADAS SOBRE LOS GRAFITIS DEL MURO DE BERLÍN. Garabatos, dedicatorias y simples mensajes de "yo estuve aquí" cubren de nuevo el trozo de Muro de Berlín que aún se conserva. La ‘East Side Gallery’ fue declarada Patrimonio Artístico dos años después de que artistas de todo el mundo la decorasen para celebrar la reunificación de Alemania. Pasados 20 años, el que fue llamado ‘Muro de la Vergüenza’ ofrece nuevos argumentos para renovar el apelativo.

La Colección

Exposición Actual

Nos Acaba de Llegar

El Ayuntamiento de Roma podría emplear a presidiarios en libertad condicional para colaborar en la lucha contra el vandalismo

Arrancan las narices a las estatuas y también las embadurnan con pintura. Los nuevos vándalos son una plaga creciente en la Ciudad Eterna, donde se ha decidido reforzar la vigilancia para poner coto a tales atrocidades.
Pero les "haría falta un ejército de 20 millones de

efectivos”, como explicaba esta semana en Los Angeles Times un asesor del Ministerio de Cultura.
Las autoridades romanas se plantean la posibilidad de emplear a convictos en libertad condicional para colaborar en las tareas de limpieza. Y, aunque no se ha concretado la fecha, el

programa podría comenzar en los próximos meses, según informa Associated Press.
Se trata de proteger el rico patrimonio de una ciudad donde nada es intocable para los destructores de monumentos, jóvenes que en su mayoría tienen estudios universitarios.

Fue André Malraux quien dijo que la Historia del Arte no es más que "la historia de lo que puede ser fotografiado". Así lo cree también Roxana Marcoci, comisaria de la exposición que estos días reúne en Nueva York 300 imágenes firmadas por algunos de los artistas más relevantes de los siglos XIX y XX.

NOSOTROS

DÓNDE ESTAMOS

NOTICIAS

REVISTA DE PRENSA

PRÓXIMAS EXPOSICIONES

PARA REGALO

VENDER UNA OBRA

PARA PROFESIONALES

 

 

CARLOS DRUZ DIEZ: "Nuestros países son caricaturales"

 

 


 CARLOS CRUZ DIEZ:

“Nuestros países son caricaturales”

Por: Ana María Durán / París, Francia

El artista venezolano, radicado en París desde hace cincuenta años, estará en Cartagena en el XXIV Taller Internacional de Arquitectura.

 

Carlos Cruz-Diez

Foto: Ana María Durán

El reconocido artista venezolano Carlos Cruz-Diez es un fiel exponente de la corriente del op art y del movimiento cinético en Hispanoamérica.  

En la esquina de la calle Pierre Sémard, en el cruce con la calle Maubeuge, Carlos Cruz-Diez se sienta en la terraza de su café preferido. Este pequeño café ha visto pasar amigos, periodistas, artistas y aficionados de la obra del maestro venezolano, quien desde hace 47 años vive en la misma calle en donde también tiene su taller. Con cerveza fría en mano, en una típica mañana de verano parisino, celebra sus cincuenta años de vida en la Ciudad Luz.
Cruz-Diez es uno de los exponentes más importantes de la corriente del op art en el mundo y su participación en el movimiento cinético de Venezuela lo convirtió en una de las figuras de la plástica en Hispanoamérica. Al frente de la Fundación del Museo de la Estampa logró una gestión destacada y su experiencia docente da cuenta de su relevancia. Gracias a su carácter activo, el maestro Carlos Cruz-Diez estará en Cartagena la semana entrante para participar en el XXIV Taller Internacional de Arquitectura.

Usted llegó a París en los años sesenta... ¿por qué escogió París?

Yo llegué por primera vez a París en 1955, salí de Caracas como Cristóbal Colón, pero a la inversa, un 12 de octubre. Llegamos primero, con mis dos hijos y con mi mujer, a Barcelona, porque yo hablaba muy poco francés. Vine a París varias veces y recuerdo que la primera vez que vimos la ciudad dijimos al unísono con mi esposa: ‘Aquí es’. París nos fascinó porque esta ciudad tiene algo muy particular que se llama confort urbano, es decir, el tamaño de las cosas no es tan grande como para aplastarte, ni están tan lejos ni tan cerca. Y con el tiempo que uno está acá, pues va haciendo amigos, la vida se convierte en un pequeño pueblo. Luego, si me muevo 300 metros, nadie me conoce, me convierto en un ser desconocido. Esa es una noción que me dio París desde el principio: la noción de libertad.

¿Cómo fue el proceso de adaptación a una nueva vida en Francia?

Desde siempre hubo una química tremenda entre París y yo. A pesar del poco francés que hablaba con mi esposa hicimos muchos amigos, y yo jamás me he sentido extranjero, tampoco me lo han hecho sentir. Hace dos años me dieron la nacionalidad francesa porque, ¡caramba, después de 50 años aquí, creo que me lo merezco! (risas). Recuerdo que cuando estaba empacando maletas para venirme, mis amigos me decían que lo primero que tenía que hacer al llegar aquí era hacerme amigo del que vende los vinos, del que vende los quesos y del carnicero. Estos son los tres personajes claves de la vida parisina.

¿A quiénes encontró en París?

Yo me fui de Venezuela porque había comenzado a elaborar una plataforma conceptual sobre lo que hoy es mi trabajo y esa no era la noción de arte que existía allá. En 1955 vine a París a visitar a mi amigo Jesús Soto, que era compañero mío de la escuela en Venezuela y me dijo que fuera a ver una exposición que se llamaba Le Mouvement, en la galería Denise René, en donde él iba a participar. Ir a verla, fue lo que realmente me dio la certeza de que yo no estaba equivocado. Encontrar gente de muchas partes del mundo que estaban en la misma aventura de conseguir nuevas nociones de arte fue muy importante para mí.

¿Cómo fue vivir en París en una de las épocas más interesantes a nivel cultural y artístico?

En el año sesenta, con mi discurso estructurado, decidí mudarme a París. La ciudad había cambiado un poco. Sin embargo, el mayor cambio se produjo en los años setenta con el crecimiento económico. Yo coincidí con un momento excepcional que fueron los años sesenta, cuando aparecieron una cantidad de movimientos artísticos en Europa y en América Latina. Entre nosotros los latinoamericanos existió una gran camaradería porque todos estábamos en la misma batalla. Recuerdo una gran exposición que se hizo en Zagreb, llamada Nouvelle Tendance, en donde todos expusimos un mismo pensamiento renovador con diversas soluciones.

¿Qué lugares frecuentaban y quiénes estaban en ese grupo?

En la calle Monsieur le Prince había dos discotecas, L’escale (La Escala) y La Candelaria. Allí nos reuníamos casi todas las noches para tomar, comer y oír música latina. En la parte de arriba se escuchaban las guitarras y abajo estaba la pista de salsa. A París llegaron muchos latinoamericanos. Los paraguayos llegaron primero, a principios de los años cuarenta, y comenzaron a divulgar la música latina. Los argentinos organizaban el asado y los venezolanos nos encargábamos de la música. Ese combo era fiesta segura.

¿Nunca contempló la posibilidad de irse de París?

París es como una bella mujer, si al primer momento le caes mal, ni porque te ayude Mandrake lograrás convencerla. La ambición que yo tenía era cambiar nociones, porque considero que el artista debe cambiar nociones. Yo tenía mi discurso y necesitaba un lugar que fuese una plataforma de emisión de mensajes como lo son Londres, Nueva York o París. Como yo soy pintor me vine a París, si hubiera sido torero me hubiera ido a Madrid. Mucha gente me dice: “¿Por qué te fuiste a París, si allá nadie compra cuadros?”. Yo no vine a París a vender cuadros, vine a debatir y a difundir mis ideas. Si hubiera querido vender cuadros, me hubiera quedado en Venezuela.

¿No le hacía falta Venezuela?

Venezuela es un país de afectos, lo que más me hacía falta era el cariño de mis amigos, porque en realidad Venezuela es un país haciéndose, un país en donde uno no sabe si lo están construyendo o demoliendo. Nuestros países son de promesas que nunca se cumplen y que si se cumplen son caricaturales.

¿Qué es lo que más le gusta de este barrio?

Ya tengo 47 años viviendo en esta misma calle, soy el último sobreviviente (risas). Este barrio representa al París del cual me enamoré. Aquí nada es perfecto porque es una ciudad que ha sido vivida, nada tiene noventa grados, pero es algo bello, es quizás la belleza de lo más o menos bien hecho.

¿Qué otros lugares de París le emocionan?

Todo París. A todos mis amigos arquitectos les hago un paseo: el París hermoso y afectivo, y el París horrible, el de la arquitectura moderna, una copia mala de lo que se ha hecho en Nueva York. La zona de la Defensa, por ejemplo, es un lugar que produce miedo y desolación.

¿Qué opina del mercado actual del arte?

El arte es un producto, todo lo que el hombre hace genera un mercado, y ese mercado del arte no es nuevo, siempre ha sido así. En el siglo XVII, los artistas tenían su taller como yo lo tengo hoy aquí, con sus familias, sus asistentes y en donde había un espacio para vender las obras. París es una plataforma para lanzar las ideas y ser oído, y eso era lo que a mí me interesaba. Creo que todavía París sigue siendo una plataforma de debate como Londres o Nueva York. Sin embargo, hay algo terrible que comprendí desde muy joven. Hay sitios en el mundo por donde no pasan las coordenadas de la historia. Antes, en los años cuarenta, lo que me desmoralizaba es que yo no tenía voz, mi país no figuraba en ninguna parte, yo veía los libros de arte y no había ningún artista venezolano, ningún artista latinoamericano. Yo me preguntaba: ¿y es que nosotros no existimos? Yo quería hacerme oír, mostrarle a la gente que yo estoy vivo y que quiero y puedo mirar de frente a un americano o a un francés. Yo creo que toda mi generación se vino a Europa porque era esa plataforma para ser escuchada. Ahora los jóvenes se van a Estados Unidos porque hay un mercado. En mi época uno no pensaba en el mercado, sino en la ideas, es otra manera de pensar.

¿Qué opina usted del precio desmedido de obras de artistas como Damien Hirst y Jeff Koons?

Lo único que queda en la historia, en la literatura, en la música o en la poesía es aquello que ha modificado un concepto, lo demás desaparece. Los impresionistas inventaron arte, los pintores abstractos inventaron arte, los verdaderos inventores son los que permanecen, los demás pueden tener un éxito económico maravilloso, pero no permanecen en el tiempo.

martes, 3 de agosto de 2010

Escultura de Jorge Blanco "El Camarada " recientemente instalada en Punta del Este - Uruguay



"El Camarada"

2010

Aluminum and paint.

50"  x  32"  x  19"

La Barra, Uruguay.

Jorge Blanco

www.jorgeblancosculpture.com

Tel : 1-941. 284.1297

jorgeblancosculpture@comcast.com

 

 

"Fleuves du Monde: L'ORENOQUE (ORINOCO)" Arte.tv

 

Estimados amigos, he aquí un gran reportaje sobre el Orinoco y sus alrededores (cerca de 45 minutos) que presentó ayer el canal arte.tv en Francia.
http://videos.arte.tv/fr/videos/fleuves_du_monde-3344386.html

 

lunes, 2 de agosto de 2010

Nueva Escultura "El Camarada " de Jorge Blanco en Punta del Este - Uruguay

 

 

 

"El Camarada"

2010

Aluminio y pintura.

127 x  81  x  48 cms.

La Barra, Uruguay.

 

 

Jorge Blanco

www.jorgeblancosculpture.com

941. 284.1297